Ciro se sentó en silencio, con su cabeza dando fuertes latidos. Si le hubiera hecho caso a sus padres y no se hubiera acercado al lugar de la construcción.
-“¿Cómo dijiste que te ocurrió esto?”, le preguntó el doctor Jones cuando terminó de poner los puntos en la frente de Ciro.
-“Iba corriendo a casa y tropecé con una grieta en la acera”, explicó Ciro, esperando que su rostro no revelará la verdad.
-“Bueno, estarás bien”, dijo el doctor Jones. “Pero sí quiero sacar unos rayos X del cráneo, sólo para estar seguro”...