“Los límites de mi lenguaje son los límites de mi mente”. Ludwig Wittgenstein (1889-1951) Filósofo Británico, de
origen Austriaco.
Límites son necesarios en la vida. Sin Límites no hay seguridad y se pierde la
responsabilidad. Encontramos límites en todas las áreas de la vida. Sin embargo cuando llegamos al terreno del Reino de Dios, aunque allí también existen límites, a veces Dios nos desafía a ir unos cuantos pasos más allá de los límites para entrar en la dimensión de lo desconocido para nosotros pero en lo conocido por Dios.
La Biblia nos habla de un día cuando un joven que le encantaba vivir dentro de los límites se acercó a Jesús pero luego de una ligera pero profunda platica, dio media vuelta y volvió a su caja por temor a lo desconocido. Veamos el pasaje en la versión Biblia De Las
Américas.
“Y he aquí se le acercó uno y dijo: Maestro, ¿qué bien haré para obtener la vida
eterna?
Y El le dijo: ¿Por qué me preguntas acerca de lo bueno? Sólo Uno es bueno; pero si deseas entrar en la vida, guarda los mandamientos.
El le dijo*: ¿Cuáles? Y Jesús respondió: No mataras; no cometerás adulterio; no hurtaras;
no darás falso testimonio;
honra a tu padre y a tu madre; y amaras a tu prójimo como a ti mismo.
El joven le dijo*:...