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Se cuenta de cierto campesino que tenía una mula ya vieja. En un
lamentable descuido, la mula cayó en un pozo que había en la finca. El
campesino oyó los bramidos del animal, y corrió para ver lo que ocurría.
Le dio pena ver a su fiel servidora en esa condición, pero después de
analizar cuidadosamente la situación, creyó que no había modo de salvar
al pobre animal, y que más valía sepultarla en el mismo pozo.
El campesino llamó a sus vecinos y les contó lo que estaba ocurriendo
y los enlisto para que le ayudaran a enterrar la mula en el pozo para
que no continuara sufriendo. Al principio, la mula se puso histérica.
Pero a medida que el campesino y sus vecinos continuaban paleando tierra
sobre sus lomos, una idea vino a su mente. A la mula se le ocurrió que
cada vez que una pala de tierra cayera sobre sus lomos. ¡ELLA DEBÍA SACUDIRSE Y SUBIR SOBRE LA TIERRA!
Esto hizo la mula palazo tras palazo. "¡SACÚDETE Y SUBE. Sacúdete y sube, sacúdete y sube!"
repetía la mula para alentarse a sí misma. No importaba cuan dolorosos
fueran los golpes de la tierra y las piedras sobre su lomo, o lo
tormentoso de la situación, la mula luchó contra el pánico, y continuó SACUDIÉNDOSE Y SUBIENDO. A sus pies se fue elevando de nivel el piso.
Los hombres sorprendidos captaron la estrategia de la mula, y eso los
alentó a continuar paleando. Poco a poco se pudo llegar hasta el punto
en que la mula cansada y abatida pudo salir de un brinco de las paredes
de aquel pozo. La tierra que parecía que la enterraría, se convirtió en
su bendición, todo por la manera en la que ella enfrentó la adversidad.
¡ASÍ ES LA VIDA! Si enfrentamos nuestros problemas y
respondemos positivamente, y rehusamos dar lugar al pánico, a la
amargura, y las lamentaciones de nuestra baja autoestima, las
adversidades, que vienen a nuestra vida a tratar de enterrarnos, nos
darán el potencial para poder salir beneficiados y bendecidos.
Romanos 5:3-4
Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en la tribulaciones,
sabiendo que la tribulación produce paciencia; y la paciencia, prueba; y
la prueba, esperanza. |