|
Cuando todo esté en tu contra, cuando nadie crea en ti y ves que todo es cada vez más difícil.
Nunca dejes de creer en ti, en tus capacidades, en tus dones, en quienes creen en ti, pero sobretodo que Dios va delante de ti.
Salmos 71:1 En ti, oh SEÑOR, me refugio; jamás sea yo avergonzado.
Salmos 25:2 Dios mío, en ti confío; no sea yo avergonzado, que no se regocijen sobre mí mis enemigos.
MIRA EL VIDEO!
|