A veces estamos tan preocupados contando nuestros problemas que olvidamos contar nuestras bendiciones.
Efesios 5:15-16
Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios,
aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
Efesios 6:13
Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiéndolo hecho todo, estar firmes.