Porque ahora quebraré su yugo de sobre ti, y romperé tus coyundas. Nahúm 1:13.
Dios permitió que los asirios oprimieran a su pueblo por algún tiempo; pero llegó la hora en que su poder debía ser quebrantado. Muchos corazones están esclavizados por Satanás y gimen amargamente bajo su yugo. Hasta ellos llegan las palabras de esperanza del Señor: «ahora quebraré su yugo de sobre ti y romperé tus coyundas».
¡Mira! El Señor te promete una liberación presente: «Ahora quebraré su yugo de sobre ti». Cree en una libertad inmediata, y según tu fe, se hará contigo en esta misma hora. Cuando Dios dice «ahora», que nadie ose decir «mañana». La liberación que se anuncia es completa, porque tu yugo...