“Aun si nos sentimos culpables, Dios es superior
a nuestros sentimientos y él lo sabe todo.”
1 Juan 3.20
Culpa. Este es un tema que para nosotros,
surge y resurge una y otra vez. Cada vez que hablamos con gente sobre permitir que Dios sane su pasado, de alguna u otra manera, terminamos señalando la culpa con la que viven por las cosas que hicieron en el pasado. La culpa es una realidad en varios sentidos.
Es real en el sentido de que todos la sentimos. No obstante, en un sentido más poderoso, es real porque es el hecho de haber hecho algo malo. En ese momento, todos la sentimos, porque todos hemos cometido errores, hemos herido a alguien o hemos causado daño. Ese es el hecho. Basado en los hechos, somos culpables de hacer esas cosas.
El problema con todo esto? Es fácil...